Con el fin de fortalecer las acciones municipales de forestación urbana, volviéndolas parte de un programa permanente y progresivo, las comisiones de Ecología y Medio Ambiente; y Desarrollo Territorial Sustentable analizan la iniciativa para reformar la fracción XIV del artículo 10 de la Ley de Protección y Conservación de Arboles Urbanos del Estado de San Luis Potosí.
Con esta iniciativa, se busca la posibilidad de fomentar la participación de los órdenes estatal y federal, así como del sector privado y social.
La iniciativa propone establecer que los ayuntamientos, deberán realizar un programa permanente y progresivo de promoción y ejecución de campañas para arborizar las áreas urbanas.
Este programa estará sujeto a disponibilidad presupuestaria, pero se podrá actuar en coordinación y cooperación con los órdenes federal y estatal, y con organizaciones sociales, profesionales, empresariales, instituciones educativas e iniciativa privada.
Se indica que la plantación y cuidado de los árboles en las ciudades, son una de las pocas acciones que podemos realizar contra las altas temperaturas y la escasez de agua; además de que también se beneficia al medio ambiente en general, es momento entonces de valorar las aportaciones de estos recursos naturales, concebirlos como propios y como una parte integrante de las ciudades.
Se menciona en la iniciativa que está documentado, por parte de la ONU, que los árboles urbanos pueden absorber hasta 150 kg de gases contaminantes por año. Como resultado, los árboles juegan un papel importante en la mitigación del cambio climático.
En las ciudades con altos niveles de contaminación, los árboles pueden mejorar la calidad el aire, haciendo que las ciudades sean lugares más saludables para vivir.
Además, son excelentes filtros para contaminantes urbanos y partículas finas como el polvo, la suciedad o el humo del aire atrapándolos en las hojas y la corteza.
La ubicación estratégica de árboles, puede ayudar a enfriar el aire entre 2 y 8 grados centígrados, y en lo tocante al tema del agua, los árboles “regulan el flujo de agua y desempeñan un papel clave en la prevención de inundaciones y la reducción del riesgo de desastres naturales.