La conmovedora historia se volvió viral luego de que el doctor compartiera cómo abandonó todos sus planes de celebración y descanso para ir a atender una cirugía.
“He recibido una llamada de sala de emergencia: ‘Doctor, tenemos un niño de 6 años con fractura de codo mientras jugaba en un inflable. Hemos tratado de transferirlo, pero nadie está aceptando los casos. ¿Nos podría ayudar?’. En Puerto Rico no hay suficientes médicos en días regulares, pueden imaginarse en días festivos”, contó.
“Yo tenía otros planes, pero no trabajar. Este niño y familia necesitan ayuda en uno de los momentos más difíciles de su vida”, agregó.
Sin embargo, él no quiso llevarse todo el crédito y también agradeció a los otros profesionales de su equipo.
“Ustedes sacrifican de su tiempo en familia para servir con calidad y empatía. No hay palabras para agradecer su compromiso”, escribió.
Vía: Plano Informativo.
