- Niños con autismo y enfermedades neurológicas reciben tratamiento sobre caballos, en la instalaciones de la Unidad Básica de Rehabilitación II del DIF Municipal.
A un mes de iniciar funciones el Centro Municipal de Equinoterapia, puesto en marcha por el Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Soledad de Graciano Sánchez, en las instalaciones de la Unidad Básica de Rehabilitación (UBR) II, se observan beneficios significativos en las y los pacientes: niñas y niños con autismo y con enfermedades neurológicas, principalmente.
Juan Lara, encargado del área de Equinoterapia, comentó que en este lugar, a través de caballos especializados, así como personal profesional, se brinda rehabilitación dirigida a cada necesidad.
Para las y los niños con autismo, este procedimiento ayuda a aumentar la sensibilidad y a reducir el miedo a tocar objetos mediante el uso de texturas que sensibilizan su entorno; en el caso de infantes con condiciones neurológicas, los beneficios incluyen relajación, especialmente por medio del calor emanado por el caballo durante las sesiones.
Las sesiones se llevan a cabo los martes y jueves con una duración aproximada de 20 minutos cada una, durante las terapias, se aplican ejercicios dirigidos a fortalecer los miembros superiores e inferiores, así como a mejorar la coordinación, el equilibrio, la seguridad y la sensibilidad de los participantes, utilizando material didáctico, asegurando que la Equinoterapia sea tanto efectiva como entretenida para ellos y ellas.
Cada paciente recibe un tratamiento de ocho sesiones durante dos meses, pero si se determina que alguien requiere más tratamiento, se ofrecen dos o tres sesiones adicionales, de lo contrario, se da de alta al paciente para permitir la entrada de nuevos participantes en el programa.
La madre de una de las pequeñas pacientes, quien presenta dificultades en su desarrollo cognitivo, mencionó que su hija ha ganado más confianza al dar algunos pasos, lo que, para los fisioterapeutas y profesionales involucrados es gratificante; además de recibir el reconocimiento de madres y padres por los progresos alcanzados durante las sesiones de Equinoterapia.