Para el futuro inmediato y a largo plazo, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), tiene retos importantes en materia de derechos universitarios y humanos que, aunque ya se abordan, se tienen que consolidar, señaló la doctora Urenda Queletzú Navarro Sánchez, titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios.
La defensora de los derechos universitarios consideró que en términos generales existen cuatro grandes retos, cada uno con sus particularidades pero que al final de cuentas redundan en avanzar en derechos universitarios y humanos, como ha sido la línea en la que se encuentra trabajando la UASLP.
Como primer reto, la doctora Navarro Sánchez consideró que es la perspectiva de género desde todas sus vertientes, sobre todo, no cejar en los esfuerzos que se han realizado para atender los problemas por violencia de género en los espacios universitarios.
“Se debe afianzar el funcionamiento de justicia universitaria que fue parte de lo que se trazó para que se incluyera en la Reforma a los Estatutos en noviembre, a efecto de que se consoliden ya las investigaciones que ha realizado la DDU para que pueda haber las sanciones correspondientes, además de desplegar todas las acciones de prevención y atención a la violencia contra las mujeres”, dijo.
En lo que respecta al enfoque de interculturalidad, la UASLP debe continuar diseñando los mecanismos de reconocimiento de que se tienen al menos dos campus en los que hay población indígena por lo que, “sería importante pensar cómo hacemos para que esos saberes fortalezcan el proceso de aprendizaje, que no haya un desplazamiento de la lengua en los saberes y que haya un acceso a las normativas en diferentes lenguas e idiomas”, destacó.
“Ya se logró que el estatuto tenga una versión en náhuatl, que es un punto de partida para que la comunidad sepa de sus derechos que están contenidos en las normas universitarias”, subrayó.
En el enfoque de diversidad, hay una agenda importante de atender, destacó, por el reconocimiento que demanda la sociedad LGTBIQ+. “Hay cuestiones que atender, pues a veces se avanza en un área, pero en otras se deja de incidir de manera puntual. Se tiene que sensibilizar a la comunidad precisamente en las diferencias que hay en identidad de género, orientación sexual y el ejercicio de la sexualidad, que son conceptos distintos”, explicó.
Por último, la defensora de los derechos universitarios consideró que el tema de inclusión educativa es otro de los retos importantes a tratar, pues habla de las personas con alguna discapacidad y de cómo la UASLP va generando puntualmente mecanismos, ajustes razonables y aquellos necesarios bajo el principio de universalidad y accesibilidad para que no sólo el entorno universitario permita eliminar las barreras que obstaculizan el derecho de las y los estudiantes.
“Tenemos estudiantes con discapacidad motriz y se deben aplicar acciones inmediatas, por ejemplo, si tienen clases en un tercer piso, que se les pueda bajar al primero. También tiene que ver con las herramientas pedagógicas, por ejemplo, para la población no oyente de nuestra comunidad que requiere mucho de apoyo visual, por lo que es importante que el profesorado esté preparado, y esa otra de las facetas, pues es importante preparar a las y los docentes para que realicen los ajustes razonables que permitan a las y los estudiantes prepararse en igualdad de condiciones”, finalizó.