Porque somos una universidad que, de cara a un nuevo siglo, replantea su visión; porque la integra una comunidad solidaria, que busca el bien común y respeta la dignidad de las personas; porque impartir educación pública de calidad es la principal misión, por su beneficio social.
Así lo afirmó el rector de la UASLP, Alejandro Javier Zermeño Guerra, al rendir su Tercer Informe anual de actividades correspondientes al periodo de enero a diciembre de 2022 y con fundamento en el artículo 59, fracción VIII del Estatuto Orgánico. Lo anterior, ante el H. Consejo Directivo Universitario (CDU), la Junta Suprema de Gobierno, invitados especiales, comunidad universitaria y público en general, que asistió al evento realizado en el Auditorio Rafael Nieto.
En su intervención, Zermeño Guerra recordó que al iniciar su periodo y sin saber que el mundo se enfrentaría una pandemia propuso un plan de trabajo que al momento está casi completo, aunque no finalizado.
“Si hay una constante que define a los universitarios, es la mejora continua. Es el siempre poner más y más metas. Los dos años de pandemia corrieron lento pero jamás nos detuvimos. Esa velocidad permitió ver con claridad los problemas estructurales que esta institución guardaba. Me permitió realizar un diagnóstico a la par que se avanzaba de manera interna y siempre de la mano y bajo la aprobación de las y los integrantes del Consejo Directivo, con el plan de trabajo”, apuntó.
Dijo que en la UASLP, el 2022 fue el año en el que las y los universitarios enfrentaron con resiliencia, compromiso y responsabilidad el regreso a clases 100% presenciales; se contó con una nueva Ley Orgánica y un Estatuto armonizados. Por primera vez, se obtuvo la Acreditación de la Gestión Institucional por parte de los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES) por un periodo de cinco años y se refrendó el ISO 9001 de calidad.
Asimismo, se realizaron cambios en los Centros de Investigación y se propuso enfocar su ser y quehacer a la investigación con sensibilidad social. Se fusionaron carreras profesionales y se crearon nuevas “porque sabemos la importancia de que éstas sean pertinentes social y profesionalmente”, subrayó el rector, al agregar que el enfoque fue reestructurar los currículos académicos para garantizar que las y los egresados se lleven consigo las herramientas que necesitan una vez que salgan al mundo laboral.
“Convencido de que, para solucionar cualquier problema, primero hay que visibilizarlo en el 2022, por primera vez, en esta institución se generó un Diagnóstico de Violencia en los espacios universitarios. El primer paso para establecer políticas internas que nos permitan caminar hacia una cultura de paz. Porque todas y todos nos merecemos un lugar de estudio y trabajo que sea seguro”, aseveró.
Sin duda, 2022 fue el año en el que la comunidad universitaria se preparó rumbo a la celebración del Centenario de la Autonomía, para visualizar una universidad más incluyente, más tecnológica, más consciente de los problemas sociales y más respetuosa del medio ambiente.
Respecto a los pendientes detectados nombró tres muy claros: un adecuado reglamento de ingresos propios, en el que se aclare la utilización de los remanentes, en caso de existir y que dijo, es un proyecto que está muy avanzado; la creación de una Secretaría de Vinculación, con la que se pretende hacer máxima presencia social con las acciones universitarias.
“Por último, pero para mí, la más importante, es la erradicación de la violencia en general y de género en particular, dado que esta institución reconoce la deuda histórica que existe para con las mujeres universitarias y se trabaja para ello”, informó.
El rector Zermeño Guerra finalizó su mensaje y dijo que la UASLP es una institución que tiene el talento humano, el espíritu, el liderazgo y la fortaleza para enfrentar con un plan de trabajo sólido de los próximos años, todos aquellos retos que están por venir. Por lo que llamó a que “los maestros enseñen, que los estudiantes estudien y que los funcionarios funcionen” por este objetivo en común que es la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.